Voilà un autre article qui me parait très intéressant. Il a été publié dans Gara, un journal très lu en Pays Basque:
El pueblo bereber reclama sus derechos
Los bereber, el pueblo autóctono del norte de Africa y diferente al árabe, ha mantenido recientemente un congreso desde el que ha reclamado al mundo la posibilidad de ejercitar sus derechos políticos, civiles y culturales, después de años y años de negación. En el encuentro no faltó la presencia vasca, de mano de Udalbiltza.
Los bereber eligieron la zona del Rif, al norte de Marruecos, para su cuarto Congreso Mundial, celebrado los pasados 4, 5 y 6 de agosto, en la ciudad de Nador. La elección no fue casual, pues este pueblo que se extiende por Túnez, Libia, Egipto, Argelia y el propio Marruecos, y cuenta también con los touareg de Mali y Níger, tiene en el Rif a uno de sus símbolos: el jefe bereber Abdelkrim, quien entre 1921 y 1926 protagonizó una heroica lucha contra las fuerzas coloniales españolas y francesas. A las fuerzas españolas, que casi logró expulsar, les provocó 20.000 bajas, y llegó a proclamar, en 1922, la República Rifereña.
Casi un siglo después, los grupos y asociaciones que representan a la nación bereber se reunieron en Nador para buscar una coordinación que les permita reclamar ante el mundo sus derechos civiles, políticos y culturales, permanentemente pisoteados a lo largo de la historia. Se trata del pueblo autóctono del norte de Africa, y se denomina también Amazigh. Dicen que las Islas Canarias son o fueron también territorio bereber. Su lengua es el Tamazigh, y no son árabes, pese a que a los ojos de los occidentales se les confunda.
Los organizadores del Congreso invitaron al mismo a otro antiguo pueblo, en este caso de Europa. Xabi Larralde participó en el encuentro en nombre de Udalbiltza, que entabló relación con los bereber con motivo del Congreso Internacional organizado en 2002 por la institución vasca en Donostia.
De vuelta en Euskal Herria, el edil de Baiona ha tomado como misión relatar las circunstancias que rodean a este pueblo, diferentes según el país en el que está asentado, aunque en ninguno de los casos medianamente aceptables. En Túnez, Libia y Egipto ni siquiera se reconoce su existencia, bajo la amenaza de la represión. Según relata Larralde, los proyectos del nacionalismo árabe, con el egipcio Nasser y sus intenciones panarabistas como uno de sus mayores exponentes, negaron todo reconocimiento.
Negociacion en Argelia
En Argelia, con una población bereber muy numerosa, existe hoy mismo un proceso de negociación con el Gobierno para lograr la oficialidad del Tamazigh. Son los habitantes de la Kabilia quienes lo protagonizan, por boca de la Aarouche, una asamblea, de origen antiguo, de los representantes municipales. Una de las tareas que se ha traído Larralde de Nador es, precisamente, entablar relaciones con ese organismo, que sin ser estrictamente una institución tiene semejanza con Udalbiltza.
La Kabilia es una zona esencialmente bereber, aunque no la única en Argelia. Su combatividad ha quedado demostrada a lo largo de la historia, y hace cuatro años se produjo una revuelta que se saldó con 130 muertos y más de 6.000 heridos. En la actualidad, en la zona se enfrentan a un dilema de estrategia política: la reclamación de la autonomía para Kabilia. El movimiento surgido para impulsar esta opción cree que así se podrían garantizar determinados derechos, aunque también hay detractores que entienden que los derechos de su pueblo no deben limitarse sólo a una parte del territorio argelino. Xabi Larralde apunta que la reclamación de los bereber no cuestiona, ni en este ni en otros estados, las fronteras existentes, sino el trato que recibe la nación Amazigh dentro de las mismas.
En Argelia, la cuestión bereber no pudo ser resuelta ni siquiera tras la guerra de la independencia, pese a que fueron quienes más y mejor lucharon contra los franceses. Los dirigentes de origen bereber del Frente de Liberación Nacional (FLN) plantearon, tras la contienda, la necesidad de una solución justa para su pueblo, pero la proposición no cuajó, entre otras cuestiones, por la desaparición física de estos dirigentes. A tenor del relato obtenido por Larralde, la larga mano del egipcio Nasser se encargó de ello.
la evolucion marroqui
En Marruecos, donde se ha celebrado el último encuentro, la población es mayoritariamente bereber, lo que no tiene correspondencia alguna con el reparto del poder. En la actualidad, el nuevo rey de Marruecos, Mohamend VI, tiene un comportamiento «algo más abierto», en palabras del representante de Udalbiltza, que el de su padre, que mantuvo una absoluta cerrazón. Por eso se ha podido celebrar en el Rif el Congreso, y últimamente se han logrado algunos avances respecto a la lengua Tamazigh, como su enseñanza de un par de horas semanales en las escuelas.
Hay quien encuentra los motivos de esta ligera apertura en la necesidad del régimen alauita de hacer frente a la expansión del movimiento islámico más radical, a riesgo de que las reclamaciones bereber adquieran mayor fuerza. Su religión es también musulmana, pero muy alejada del fundamentalismo, cuya imposición, entienden, tendría nefastas consecuencias para su identidad.
En esta complicada tesitura se celebró el encuentro de Nador, en el que, además de buscar la forma de reclamar ante el mundo los derechos de su nación, se trataron otras cuestiones relativas al desarrollo como pueblo, alguna de las cuales puede resultar familiar para los vascos. Ya se han levantado voces que proponen la estandarización de la lengua Tamazigh, que permita su normalización. Hay también quien se opone a la propuesta, porque, a su juicio, supondría la defunción de los muy numerosos dialectos.
Los bereber tienen mucho camino que recorrer, pese a ser el pueblo más antiguo del norte de Africa. -
BAIONA
Admiración por euskal herria
La relación entre los vascos y los bereber se ha establecido en numerosas ocasiones, hasta el punto de buscar semejanzas en palabras de las dos lenguas. Dicen también que la primera gramática bereber la hizo un fraile vasco llamado Sarrionaindia, o algo similar.
Lo que sí ha constatado Xabi Larralde en su intervención en Nador es la «admiración» de la nación Amazigh por los vascos y su lucha. Ello no quiere decir que no exista algún punto de desencuentro. Por ejemplo, la representación de los bereber del Atlas (Marruecos) expresó al edil bayonés que, si bien seguían atentamente la evolución de Euskal Herria, tenían problemas para expresar abiertamente su apoyo, debido a la gran cobertura que el pueblo vasco da al Frente Polisario. Explicaron que no se oponen a la autodeterminación del Sahara Occidental, pero que el objetivo de crear una república definida como árabe no anuncia nada bueno para los derechos bereber.
En el plenario del Congreso, el representante de Udalbiltza resaltó el valor de la construcción nacional, en tanto que permite «crear instrumentos para ganar espacios y ejercer derechos».
Para la institución vasca, el encuentro permite abrir campos en el trabajo de las relaciones internacionales, aunque también trae tareas para casa, por ejemplo, sobre la inmigración. Aunque la población europea crea que por el Estrecho de Gibraltar sólo pasan árabes, lo cierto es que muchos de los que pueden llegar a jugarse la vida por un supuesto futuro son bereber, con su propia identidad y lengua.
En el caso de Catalunya, la Generalitat tiene un programa específico para los inmigrantes bereber. La presencia catalana se hizo notar en el Congreso de Nador, con representación gubernamental y de ERC. Este partido ha adquirido el compromiso de llevar una iniciativa a las Cortes de Madrid sobre la utilización de armas químicas por parte española en la guerra del Rif.
in: http://www.gara.net/idatzia/20050813/art126064.php